El filósofo José Pablo Feinmann afirmó que la desigualdad que visibilizó la pandemia puso en discusión la histórica “injusticia”, de que las tierras y las riquezas, “estén repartidas en unas pocas manos”.
El filósofo, ensayista y escritor José Pablo Feinmann reflexionó sobre algunos de las consecuencias de la pandemia en Argentina y sostuvo que a partir de la crisis económica que genera el virus se está poniendo en discusión la distribución de las riquezas y se pone en evidencia cómo el llamado “conquistador”, o poderoso ha “arrasado la tierra”.
En diálogo con Elizabet Vega Gron, Pablo Rizzi y Andrea Cuellar Camarena, señaló que en las sociedades actuales se ve la reproducción de las “relaciones de dominación”, que anteceden a la “devastación de la naturaleza”. Asimismo, resaltó que “las tierras” forman parte de la disputa central del presente. Por un lado, está “la injusticia de que estén repartidas en unas pocas manos”, y en contraposición “los sin tierra están desprotegidos”.
Por otro lado, se reconoció como un admirador de los movimientos feministas y consideró que “todo lo que implique una evolución está bien”. Aunque, reconoció que por una cuestión de época no se puede aggiornar a ciertas discusiones, como el lenguaje inclusivo, que si bien no lo utiliza tampoco se opone. “Siento que me estoy apropiando de algo que no me corresponde”, consideró el filósofo.
Por último, Feinmann remarcó que apoya “con entusiasmo” el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo que fue presentado el martes pasado en el Congreso de la Nación por el Poder Ejecutivo de la Nación. También señaló que si bien se está dando un proceso de liberación que comenzó en el siglo XX, aún “hay muchas deudas por saldar”, como por ejemplo con respecto al histórico cercenamiento del “derecho al goce” de las mujeres.
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