La periodista de la Cultura, Patricia Rozas, quien conduce el programa Poco Ruido y Muchas Nueces hizo una cobertura especial para Radio Caput desde la Plaza de los Dos Congresos donde trabajadores, sindicatos y agrupaciones que nuclean a las distintas expresiones del arte y la cultura exigieron frente al Congreso nacional que se apruebe en la Cámara de Senadores la ley que prorrogaría por 50 años las asignaciones específicas destinadas al sostenimiento de actividades culturales.

Tras darse a conocer que el proyecto no entró en el orden del día para ser tratado en la sesión de este jueves, en la que se debatió la ampliación de la Corte Suprema. El espacio Unidxs por la Cultura ratificó su presencia frente al Congreso, dado que sus miembros consideran que deben “seguir en la calle” y sostuvieron que en caso de no extenderse el plazo de vigencia, los fondos quedarán bajo la órbita del Poder Ejecutivo, «lo que implicaría, como mínimo, una pérdida de autonomía para las entidades culturales».

El proyecto fue presentado por el diputado del Frente de Todos Pablo Carro, quien estuvo presente durante el acto frente al Congreso: “Me hubiera gustado llegar a este lugar para decirles que mañana se iba aprobar el proyecto de ley. Pero sepan que nuestro gobierno tiene el firme compromiso de no dejar tirada a nuestra cultura”, sostuvo.

Patricia Rozas dialogó con distintxs referentes de la cultura que se hallaban en las calles, reclamando que no haya un apagón cultural en la Argentina:

La actriz Nara Carreira sobre la Ley de prórroga de asignaciones específicas, señaló que “estamos en la calle cómo desde hace 5 años, estas asignaciones son fundamentales para el desarrollo de la cultura en nuestro país. Explicamos diputado por diputado y logramos media sanción por 50 años y esperamos que los senadores lo resuelvan en breve, nosotros hacemos a la identidad y la soberanía nacional”. “Demandamos que se trate lo antes posible si no es mañana que sea pronto, en diciembre pierde estado parlamentario y se queda la cultura sin financiamiento. Evitemos el apagón cultural”. 

Luis Lázaro de la coalición por una comunicación democrática, una carpa por la cultura y el pluralismo. Una ley que estableció como política de estado generar recursos para los distintos organismos, una estructura que sostiene derechos vinculados a la com y la cultura, que merced a las políticas neoliberales fueron avasallados y le pusieron como fecha de vencimiento el 2022. Una batalla para que se entienda el daño que provocaría y el proyecto del diputado Pablo Carro logró media sanción, nos queda esperar que el Senado de la Nación ratifique que la cultura y la comunicación son un derecho y no un negocio” “Si no hay diversidad y pluralismo no hay democracia, no es un privilegio sectorial sino un derecho colectivo por lo que peleamos” señaló Lázaro. 

El director de cine y televisión, y coordinador general de la Multisectorial por el Trabajo, la Ficción y la Industria Nacional Audiovisual, Guillermo Tello señaló en la Plaza de los dos Congreso que “estamos haciendo el aguante cultural, esperábamos que traten las asignaciones específicas a los organismos descentralizados que aseguran el derecho humano a la diversidad cultural y a la comunicación. De ese mofo el fomento llega a la población, el 31 de diciembre caducan las asignaciones por una política metida en el consenso fiscal por el macrismo. Una reducción presupuestaria con forceps en el 2017. Los organismos que producen arte y cultura y sus trabajadores y los beneficiarios que son los espectadores de todo el país”. «La oposición se niega a bajar a tratar esta prorroga, dejando sin acceso a la cultura para la población, vamos a terminar viendo solamente contenido extranjero», agregó Guillermo Tello.   

El músico Gustavo Rudemburg indicó que «vamos a seguir reunidos, con actividades artísticas, seguimos en alerta, esperamos que los senadores entiendan cuánto nos afecta que no traten esta ley. El financiamiento del INAMU, INCAA, Bibliotecas Populares, Los Fomeca, la cultura que no tiene fines de lucro hoy está fomentada y dependen de ello para sostenerse. No está bueno que le dejemos a las generaciones futuras esta herencia”.

 

Parte del comunicado y de la posterior conferencia de prensa de los colectivos que se declararon en alerta hasta que se apruebe el proyecto de ley que asegura el financiamiento a la cultura.

En consonancia con lo expresado por el Ministerio de Cultura, el Consejo Federal de Cultura, el Instituto del Teatro, el INCAA, el INAMU, el ENACOM, entre otros, solicitamos el pronto tratamiento y aprobación por parte de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, sabiendo que de ello depende la continuidad de trabajo de técnicos/as de radio, de televisión, de cine, de espectáculos teatrales, de espectáculos musicales, artistas de la escena cultural federal, actrices, actores, autores/as, músicos/as, compositores/as, bailarines/as, coreógrafos/as, directoras/es, salas teatrales, salas musicales, salas cinematográficas, bibliotecas populares, gestores culturales. 

En suma: más de 634.000 trabajadores/as del sector privado y más de 90.000 del sector público están pendientes de su apoyo

Es urgente que el Senado Nacional de tratamiento y aprobación en continuidad con la Cámara de Diputados, la ley que mantendrá la continuidad de los fondos de asignación específica para todo el sector cultural y de comunicación social.

Para defender nuestra soberanía, proteger la diversidad cultural, generar nuevos puestos de trabajo argentino y mantener el entramado productivo de las industrias culturales a lo largo y a lo ancho de nuestro país, exigimos el tratamiento inmediato del proyecto ya aprobado en la Comisión de Hacienda y Presupuesto, y de Educación y Cultura con media sanción en Diputados, porque si nuestros Senadores/as no nos escuchan, cuando nos encontremos con organismos desfinanciados y vacíos, sin arte ni trabajo, entonces será demasiado tarde.

Los fondos de asignaciones específicas son fondos destinados a fomentar, incentivar y asistir la producción de obras nacionales de música, de teatro, audiovisuales, cinematográficas, contenidos para televisión, radio, publicaciones de ensayo, informes y obradas para la cultura, ediciones y publicaciones de libros, garantizan la libertad de expresión y el buen trato al público, el acceso a la literatura y la diversidad cultural en todo el territorio nacional, una de las distribución de fondos más federales con la que contamos y con gran impacto en cada una de nuestras provincias. 

Lo administran: El Instituto Nacional del Teatro – INT, Instituto Nacional de la Música – INAMU, Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales – INCAA, Comisión Nacional de Bibliotecas Populares- CONABIP, Radio y Televisión Argentina – RTA, Fondo de Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual – FOMECA y la Defensoría del Público de la Comunicación Audiovisual. 

La ley viene en revisión de la Cámara de Diputados, que además ya cuenta con dictamen de mayoría en la Comisión de Educación y Cultura, al igual que en la Comisión de Presupuesto de Senadores, prevé la extensión de éstas asignaciones hasta el 31/12/2072. Tiene como fin el sostenimiento de sectores de la cultura nacional tales como el INaMu (Instituto Nacional de la Música), el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), el INT (Instituto Nacional del Teatro), Radio y Televisión Argentina, la CoNaBiP (Comisión Nacional de Bibliotecas Populares) , el FOMECA (Fondo de Fomento Concursable para Medios de Comunicación Audiovisual) y la Defensoría del Público de Comunicación Audiovisual.  

El Diputado Pablo Carro expuso en la presentación del proyecto que “en diciembre de 2017, con un nuevo consenso fiscal” que tenía como marco la firma del Pacto Fiscal y la aprobación del Presupuesto General para 2018, el Poder Ejecutivo coló un articulado en un proyecto que tuvo tratamiento express en ambas Cámaras el mismo día 21 de diciembre de 2017. Entre los incisos del artículo 4° se manifestó la voluntad ajustadora para arremeter con lo que venía siendo una bandera de la política de Estado de los argentinos: la asignación específica sin fecha de vencimiento de fondos para Fondos de educación y cultura. No fue tema de debate ni tampoco fue registrado por la crónica periodística. Otros eran los temas de la macroeconomía que sacudían al país, y así se modificó el status normativo fijando el vencimiento de la asignación automática de estos fondos en diciembre de 2022 desde una visión extremadamente fiscalista. Son cuentas que tienen una incidencia relativa muy menor sobre las ecuaciones de la política económica nacional pero que resultan extremadamente sensibles para un sector como el audiovisual, que es objeto de promoción desde los Estados Unidos hasta Turquía, desde Francia hasta Chile”, quisiera agregar qué estos fondos surgen de la  Ley 26.522 que cobra un gravamen directo a los licenciatarios de los servicios de comunicación audiovisuales (dueños de canales de aire, canales de cable, empresas de servicios de televisión por cable y/o triple play, empresas de radio AM y FM). De la Ley 17.741 que destina el 10% del valor de la venta de entradas a las salas de cine de todo el país para el Fondo de Fomento del Cine en el INCAA, y de la Ley 20.630 que destina el 5% de los premios ganados en juegos de azar, quiniela, sorteo, carreras y otros al Fondo Especial para Bibliotecas Populares. 

Pero estos gravámenes no se van a dejar de cobrar, tampoco estamos creando otro nuevo impuesto, lo que pretendemos hacer es dar PREVISIBILIDAD a la diversidad cultural y a las industrias culturales, muy especialmente a las de aquellas provincias que sin estos fondos les sería prácticamente imposible acceder a la producción cultural y comunicacional. El estímulo a la generación de derechos de autor en una industria sin chimeneas y que posiciona la marca “hecho en Argentina”.   

Por otra parte, más de 634.000 puestos directos de trabajo y otros 600.000 puestos de trabajo indirecto están pendientes de estas partidas. Antes de la pandemia el sector recaudó 967.241 millones de pesos, 5,2% del total de la economía del año 2019 y 238.879 millones de pesos de valor agregado, 3,1% del total, también 2019.  

Trabajadoras y trabajadores de la cultura, en todas las provincias, dependen de la continuidad de este flujo de fondos para garantizar el pan en su mesa y millones de argentinos/as de nuestros organismos culturales para garantizar el derecho constitucional de acceso a la diversidad cultural. Los aportes genuinos para la cultura son una inversión y no un gasto. Permiten la accesibilidad de diversas audiencias y han modificado el mapa de desarrollo cultural generando polos de actividad tanto en las urbes como en las periferias de nuestro país.  La defensa de la cultura es la defensa de nuestra soberanía, y debe contar con los recursos necesarios para que exista producción y distribución de bienes y servicios para la construcción plena de ciudadanía.  

LA CULTURA ES UN DERECHO CONSTITUCIONAL Y NO PUEDE NI DEBE ESTAR PENDIENTE DE UN INMINENTE VENCIMIENTO.