El médico sanitarista Jorge Rachid habló sobre su viaje al Lago Escondido, en el marco de la séptima edición de la Marcha por la Soberanía, donde fue hostigado junto a otras personas por la patota del magnate Joe Lewis.

Rachid explicó que «la movilización constó de tres columnas». Se llega a través de un camino de 46 kilómetros donde «tuvimos que hacer campamentos, trasladarnos en Kayak 12 kilómetros más hasta el Lago Escondido, de ahí hasta la Villa de los Patriotas y finalmente llegamos frente a la residencia de Lewis«.

En diálogo con Juan Martín Ramos Padilla, el sanitarista afirmó que «nos pusieron música las 24 horas para no dejarnos dormir». Agregó que «a un compañero le tiraron una piedra en la cabeza y se salvó por levantar la rodilla, una compañera de Télam fue atropellada por un caballo, otro fue agredido en el piso a patadas».

Amplió que «durante la marcha hubo 40 policías mirando cuando sucedían estos hechos». Subrayó que «otra de las columnas se dirigió a Sierra Grande donde Lewis tiene una pista de aterrizaje que explica el diseño estratégico de la OTAN para el atlántico sur que se complementa con la escisión de la patagonia».

Enfatizó que «Lewis es parte del diseño estratégico que dice que el agua dulce, el petróleo, el gas y el litio deben ser protegidos por los Estados Unidos de las inversiones chinas y rusas porque son un peligro para nuestros pueblos «. Destacó que «es un problema de coloniaje que está amparando a la oposición».

En ese sentido, concluyó que «necesitan que la Patagonia sea escindida de la Argentina para impedir que se refunde el UNASUR e impedir que se amplíe la Corte Suprema porque es la única forma de desbaratar el proceso de saqueo del país».

Pasó en Caput