En las mañanas de Lugares Comunes se tomaron un momento para la reflexión, permitiéndose ver en perspectiva histórica los acontecimientos del presente, Elizabet Vega Gron, directora de Radio Caput analizó el escenario político tras la salida de Martín Guzmán del Ministerio de Economía, y junto a Roberto Rinaldi y Javier Corcuera, y lo caracterizó como «el debate de la lapicera».
En los homenajes por la muerte de Perón hubo menciones del presidente y la vicepresidenta a Perón, en medio de la tensión política por el rumbo económico y el panorama electoral para el año próximo, Elizabet rescató las dos miradas e interpretaciones del peronismo que reflejan.
«Discutir qué es el peronismo no es una discusión de museo, aunque haya peronistas de museo. Tuvimos un fin de semana en el que se abría al debate sobre el Perón que se ajusta a cada uno de los interlocutores en ambos actos que, con tribunas diferentes, muestra quienes adscriben a esos dos modelos dentro del peronismo» manifestó Elizabet Vega Gron.
Y Elizabet continuó encadenando representaciones de lo vivido en los actos, del viernes de Alberto Fernández y del sábado de Cristina, en homenaje a Juan Perón, con mensajes que iban y venían, a la misma hora que el exministro Martín Guzmán, sustituido por Silvina Batakis, replanteaba su futuro.
Fue un intercambio doctrinario, los dos oradores prepararon sus discursos basados en discursos de Perón, cuyos discursos e ideas eran una suerte caja de herramientas. Cristina uso “Conducción Política” que era la desgravación de los discursos que daba Evita en la Escuela de Conducción Política para dirigentes de la CGT. No es inocente el soporte elegido por Cristina, ni quien se lo había dedicado a Néstor, que fue Julián Domínguez que se sabe no es uno de los ministros más amigos de Cristina. También estaba Felipe Solá en primera fila, lo que muestra que Cristina más allá de todas las peleas circunstanciales, nunca corta el diálogo con ninguno de los sectores con los que mantuvo o mantiene diferencias.
«Si hay algo que Cristina dejó en claro, en todos los discursos es que toda la discusión es cómo la pasa mejor o peor la gente, y el camino que siguen algunos dirigentes los alejan del bienestar de la gente. Es dónde puso el límite en cualquier situación o cualquier debate» manifestó.
Respecto del discurso de Juan José Mussi, recalcó que «muestra ese actor que aparece escondido. que es la importancia de la voz de los intendentes del conurbano. Que es convive cotidianamente con situaciones muy desiguales es donde se muestra en carne viva la desigualdad social. Con la exigencia de un peronismo unido pero que, cuando habla de la metáfora de los padres que se separan, que no se olviden de los hijos, Mussi pone el mismo límite que pone Cristina, que puede estar equivocada o no, no dice que se las sabe todas, dice que ella es la que no se olvida de los hijos»
La diferencia está en lo que significa para Perón mismo. Cristina agarró el manual y dio las definiciones. Se persuade con hechos. No hay diálogos eternos. No se puede trabar un gobierno en función de que el otro se dé cuenta de que tenés razón.
Ambas cartas de renuncia, tanto la de Kulfas cómo la de Guzmán, fueron extensas hablando de los logros de su gestión y también de sus críticas que coinciden en que los funcionarios que están no quieren aumentar tarifas, para gastar menos en subsidios. Parte del acuerdo con el Fondo Monetario. El precio de la energía es tan importante porque es el insumo de todo. No funciona la segmentación porque es difícil que funcione. En una economía con familias endeudadas.
Por eso hay muchos actores, vinculados a las gestiones provinciales y municipales por la llegada de Batakis, por su experiencia tanto en el ministerio del interior, como en la provincia de Buenos Aires, que es la provincia que como dijo De Mendiguen en una entrevista con nosotros aquí en Radio Caput, concentra el 70% del PBI industrial.
Lo que sucedió con Estela de Carlotto mediando, da una señal de lo que significan las madres y lo central de los DDHH en la lógica del Frente de Todos. Una posible candidata a premio nobel de la paz tuvo que llamar al presidente para pedirle que haga lo que tiene que hacer que es conducir, el que tiene la responsabilidad, el que tiene la lapicera, aunque la tenga guardada. Veremos cómo sigue lo que debemos denominar el debate de las lapiceras
Desde una perspectiva fenomenológica Heideggeriana, la cosa viene a la patencia a partir de su inutilidad, cuando no cumple su función, su por mor de, o para qué en la cadena de remisiones. Bueno, qué cosa más inútil que una lapicera que no escribe, veremos como sigue.
Por Elizabet Vega Gron
Pasó en Caput. #LugaresComunes.
